ALCOHOLISMO, SED DE PODER

Las personas que sufren esta adicción, son almas aquejadas del sufrimiento de no poder ejercer autoridad.

Es curioso, no he encontrado estos casos directamente, pero si personas que relatan tener familiares con el problema. Y es difícil gestionarlo, porque no podemos decidir por los demás. Cada uno tomamos nuestras iniciativas.

En el Tarot, nos podría venir representado por el diablo (como todas las adicciones y «esclavitudes»), por la fuerza invertida y, si es un caso de manual, como el que cuento aquí, casi seguro con un emperador invertido.

Es más fácil entender las situaciones cuando las comprendes desde un plano superior. Como he dicho muchas veces, no somos un cuerpo; somos un alma que tiene varios cuerpos. Hemos vivido otras vidas, en este mundo y en otros. Nuestro bagaje es mucho mayor de lo que somos conscientes.

Imaginad un general del ejercito de Julio Cesar, altivo, ambicioso y sanginario. Probablemente acostumbrado a que sus ordenes se cumplan a la primera, fueran razonables o no. El sufrimiento de los demás le traía sin cuidado, solo importaba la gloria de la victoria, la fuerza del imperio y los laureles del Cesar. Y él estaba en un lugar privilegiado, en lo alto de la cadena alimenticia.

Naturalmente, esta alma tiene que quemar un karma, dañó a muchas personas. Aprendió alguna lección, pero muchas otras quedaron pendientes.

Cuando tiene la oportunidad de volver a encarnar en persona -que por cierto, no será rápido ni fácil-, se encuentra en el cuerpecito de un niño en una familia desestructurada, sufriendo abusos y pobreza. No recuerda su vida anterior, pero le quema por dentro un enojo constante, se siente ofendido, su vida es una enorme injusticia. En cuanto supere la adolescencia y se vea fuerte, tendrá tendencia a ser un maltratador y al alcoholismo.

He dicho que tendrá tendencia ¿si? Es muy diferente de fijar que ese será su destino. Las personas tenemos algo muy valioso que se llama «libre albedrío». Nada está escrito con fuego. Incluso los votos más sagrados y las lealtades más limitantes pueden romperse.

Lo cierto es que esa persona, si decide recibir un tratamiento para superar su adicción, y se da cuenta de que debe ser menos agresivo, estará haciendo un esfuerzo enorme. Necesitará todo en apoyo posible y merecerá admiración. En caso de que se abandone a la furia y al alcohol, bueno, será una vida en vano. En la próxima volverá a empezar. El problema es que cada oportunidad arrastra más karma y puede que la siguiente vida le añada dificultades y sufrimientos.

Para ayudar a las personas, siempre hay que hacerlo desde el amor y el respeto, sin juzgar. En casos así se hace realmente difícil. Lo único que podemos exigir es que no nos afecten a nosotros. Cuando tienes un padre, un marido, una hija alcohólica, debes distanciarte hasta que no esté dispuesto o dispuesta a cambiar. Hacerle saber que, cuando esté preparado/a para recibir ayuda, la tendrá, pero mientras no permitirás que te arrastre a su desorden, te maltrate o viva a tus expensas.

No os perdáis mi webinar de Marzo: Liberarse de esclavitudes. Es sobre el mismo tema y hay una razón: A finales de Marzo habrá una energía especial para tener la fortaleza de superar temas que nos esclavizan

Nos vemos el 16 de Marzo.

Natalia